La habitación era de buen tamaño y bien equipada y tenía una chimenea y un espacio de almacenamiento. Me ha gustado la comida buena del hotel. Era una ubicación bonita y el personal era profesional y muy amable.

Una habitación súper bonita y cómoda con una decoración genial. Me encantaron las vistas que tenía, ¡podía relajarme mirando el paisaje! La chimenea y el espacio de almacenamiento fueron la guinda del pastel. 🔥

Una habitación bien equipada, una cama cómoda, un baño muy limpio. Un baño bien equipado con una bañera. Ubicación muy buena, la mejor y cómoda no muy lejos del paseo marítimo y también de un puerto deportivo; el hotel tiene parking público...

Las vistas desde el hotel son preciosas. La habitación es espaciosa y limpia.La ubicación es espectacular cerca del puerto.El hotel es acogedor y bien construido.El personal de recepción es amable.Los decks ofrecen vistas impresionantes.El parking es fabuloso.

Nada, todo fue perfecto.

Este lugar ofrece habitaciones prácticas con buen diseño y tranquilidad, baños bonitos con duchas modernas a ras de suelo, y un desayuno delicioso y abundante a un precio bastante asequible.

Este hotel fue una grata sorpresa durante mi reciente estancia. La ubicación es espectacular, justo en la orilla del mar, a solo unas cuadras de donde atraca el ferry. La vista desde el hotel es impresionante, con un muelle encantador y unas vistas preciosas del puerto. Además, el hotel ofrece una excelente relación calidad-precio, con unos precios muy asequibles para lo que ofrece. Las habitaciones son espaciosas y limpias, y tuve la suerte de contar con una habitación con un enorme balcón. quiero destacar el amable servicio y la atención al detalle por parte del personal. El desayuno continental incluido fue sencillo pero apetecible, y pude disfrutarlo en una sala acogedora con vistas al mar.

Todo fue perfecto.

Me alojé recientemente en un hotel en Long Island y tuve una experiencia fantástica. El hotel está ubicado en un bello entorno, justo en el paseo marítimo y cerca del ferry. La habitación en la que me quedé era espaciosa y limpia, y tenía unas vistas increíbles. Además, el baño estaba reformado y era muy cómodo. El servicio fue amable y servicial, y el desayuno incluido fue sencillo pero apetecible. Además, el hotel contaba con otras comodidades, como un aparcamiento fabuloso.

Aunque mi estancia fue muy agradable, hubo un pequeño inconveniente. La reserva inicial prometía una habitación con chimenea, pero al llegar me dieron una habitación sin chimenea.